jueves, 26 de abril de 2012

Principio básico para aprovechar plantas medicinales

La mayoría de nosotros en algún momento de nuestra vida hemos recurrido al uso de las plantas medicinales. Claro hay que entender que esto no solo se abarca comprando remedios con mas elaboración y empaquetados, sino que también hemos tomado té de tila para los nervios o de manzanilla para el estomago, palo azul para los riñones; eso también son plantas medicinales.

Palo azul y más plantas


¿Pero sabes cuantas formas diferentes de tomar una misma planta hay? Ó con mayor sofisticación sabes ¿cómo hacer para prepara tu propio medicamento?

Presento aquí una breve reseña de lo que deberías hacer, si en algún momento se ofrece, tu propias plantas medicinales.

Para iniciar, normalmente las plantas medicinales las podemos comprar en el mercado, en empaques medianamente sofisticados, hasta productos ya bien elaborados en las farmacias y con los herboristas. Pero si tú eres un bien aventurado aficionado o especialista o simplemente pretendes hacer tus medicamentos debes tomar en cuenta las siguientes recomendaciones.

Número 1, ¡conozca bien la planta! Hay muchas plantas que se pueden confundir fácilmente con otras, a veces tóxicas. Tampoco hay que dejarse llevar solo por el nombre común que varía mucho de región en región.

Número 2, recolección. Recuerda que muchas plantas tienen su poder curativo de acuerdo a la temporada del año en la que se recolectan. Por ejemplo, en algunas comunidades ciertas plantas solo se colectan en Semana Santa y su preparación es aún más compleja, pues se mantienen en agua durante 7 días a la luz de la luna. Otra cosa que debes tener en cuenta son las partes de las plantas que vas a recolectar, por ejemplo flores cuando haya floración o semillas cuando estén secas, esto con el fin de que en el transporte no se echen a perder pues no te servirán mucho húmedas. Los tallos quizás se deben recolectar sin tantas ramificaciones y después de la floración, esto para que la savia sea más nutritiva y no se enfoca en la flores.

plantas secas



Después viene el secado Las plantas se pudren y se echan a perder si no las secamos, ¿por qué? Sencillo, las plantas requieren agua para su metabolismo, como los seres humanos; en la plantas el agua permite el transporte de nutrientes por todos su partes vegetativas, esto es desde la raíz hasta las hojas. ¿Como las puedo secar? Un proceso manual muy rápido es colocar las plantas extendidas en una manta, lona o tabla de madera, o colgarlas al aire libre, siempre en la sombra. Aunque secarlas de esta forma tiene el inconveniente de que puede entrar mucho polvo y otra cosas indeseables. Por lo que puedes elaborar el siguiente sistema. Utiliza una superficie metálica oscura, (color negro) esta debe de ser proyectada hacía la dirección del sol, esto es el esqueleto de nuestro sistema tipo invernadero. Después se cubre con una cobertura transparente (vidrio o plástico). Esto permitirá que entre la radiación solar y evita que se escape el aire caliente.

Secado de plantas

El siguiente paso tiene dos vías. Puedes tomar las plantas secas y hacer infusiones (poner un poco de tu planta seca en cierta cantidad de agua), esto procurando que sea mucho menor la proporción entre planta y agua en la cual hervirás para obtener sus compuestos, cualquiera que estos sean. Se deben saber las cantidades antes de consumir un té.

La otra vía es que maceres las plantas y lo sumerges en alcohol. En este proceso con las filtraciones se pueden perder más compuestos importantes, por lo que si lo piensas usar debe ser inmediatamente después de ser macerados, ya que no conviene su almacenamiento.

Ya por último debes guardar conservas en envases de vidrio, de preferencia color ámbar (alguna bebidas alcohólicas se venden en estas botellas) y que se encuentren perfectamente cerrados. Claro hay que recordar que es muy difícil controlar las cantidades.
Frasco para almacenar


Así que quizás estos consejos te sirvan para saber un principio básico para aprovechar plantas medicinales.

Referencias.
        o Alemda, M., M.S.Cáceres, M. Machaín-Singer y J.C. Pulfer.2005. Guía de uso de sacadores solares para frutas, legumbre, hortalizas, plantas medicinales y carnes. Fundación Celestina Pérez de Almada. Asunción, Paraguay. 42p.
    
       o Cáceres.S.M.A. 2002. Manual de uso de hierbas medicinales del Paraguay. Fundación Celestina Pérez de Almada. Asunción, Paraguay 73p.

        o Rubel, A.J. 1989. Susto: una enfermedad popular, Fondo de Cultura Económica. México, D.F. o Solien de González. N. 1939. Breast-feding, weaning, and acculturation. Journal Pediatric. Vol 62. 577-588 p.

3 comentarios: